La historia es muy linda…
porque éstos dos muchachos con mucho esfuerzo,
y agregando “ese amor por lo que hacemos”
lograron fabricar su primer lata de pintura totalmente en forma artesanal.
Y de la misma manera realizaron la entrega de ese
producto a su primer, y único
cliente, quien ya conocía el desempeño de estos dos
jóvenes emprendedores de épocas de la fábrica
donde ellos se desempeñaban como empleados.
…Así en el año 1965,
Héctor Franchi y Alberto Pérez, forman la sociedad
Pinturas Gillmore S.R.L. una pequeña empresa
familiar que se ha mantenido a través de todos éstos
años, gracias a la calidad de sus productos, los cuales
aún hoy siguen siendo ”artesanales”, ya que cada
producto es elaborado y controlado por
diferentes personas.
Siempre sentimos el orgullo de ser diferentes.
Sin grandes espacios físicos, ni máquinas de última
generación, somos grandes en calidad.
Los exhibidores que obsequiamos a nuestros clientes
son la fiel prueba de nuestro compromiso, ya que aún
son confeccionados de forma artesanal, uno por
uno, utilizando el verdadero producto que recibirán
nuestros clientes.
Esa sigue siendo nuestra publicidad!
Ya han pasado más de 50 años!
por eso quisimos compartir un poquito de nuestra
historia.
Pérez y Franchi siguen y seguirán juntos luchando
contra tanta adversidad….
competencia desleal, grandes monopolios nacionales
y/o fusionados a marcas extranjeras que además, son
quienes obtienen subsidios.
queremos seguir manteniendo el espíritu y valores de
los comienzos
y ser una necesidad de elección para quiénes
pretendan obtener una pintura de verdadera calidad.
Pérez y Franchi han firmado un contrato de amistad
de por vida.
Obviamente son amigos de los de antes…
con principios, sinceros y leales,
y así seguirán elaborados nuestros productos.